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Chicama Surf Resort es el lugar elegido por los surfistas peruanos para correr las olas perfectas, un sitio que fue construido el 2006, y por lo mismo, absolutamente moderno, donde nada se ha dejado al azar.

En el resort, hay 19 habitaciones decoradas con balcones que entregan una vista fabulosa. Todas las instalaciones, desde el restaurante a la barra del gimnasio y el sauna de la piscina son modernas y de primer nivel. Los surfistas aquí viven en un verdadero paraíso, ya que hay incluso un servicio de barco que los recoge al final de la ola y los lleva de vuelta al lugar donde comenzar a montar otra, ahorrándoles un desgaste físico enorme.

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Chicama es también un buen lugar para el windsurf y el kitesurf, es también un lugar donde ejercitar la mente, además del cuerpo, una zona que se ha ganado el título de ser llamada como “la nueva ciudad del Cusco”, porque para llegar a la ciudad del surf, Chan Chan, hay que pasar por todos los sitios de importancia cultural en la Ruta Moche, es decir, El Brujo, Sipán y Sicán.

Chan Chan es de interés para todos los interesados en la historia del mundo, y también en la historia del surf. Construída alrededor del año 1.300 D.C., Chan Chan fué la ciudad de adobe más grande del Perú, y el lugar más antiguo donde se construía embarcaciones de totora, que se fabrican hasta el día de hoy.

A unos 15 kilómetros de Trujillo, están los templos mochicas del sol y la luna. Según cuenta la leyenda, la Huaca del Sol fue construída en solo 3 días por un cuarto de millón de hombres, que apilaron 70 millones de adobes en una pirámide de 40 metros de altura. Huaca de la Luna está hecha de la superposición de estructuras, construídas durante muchas generaciones, ocultando una tumba que oculta a 40 guerreros Moches, que fueron sacrificados.

Vía: waterwaystravel, Fotos: flickr

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